LA INMENSA MINORÍA
Por Alberto Velásquez Martínez
Prolija investigación sobre la música andina ha elaborado el maestro John Jairo Torres de la Pava. En su extenso y documentado libro, Las músicas Andinas Colombianas en los albores del siglo XXI, queda el lector enterado no solo de los grandes textos musicales colombianos, sino de la riqueza folclórica del país, de sus ritmos, de sus compositores e intérpretes, de las partituras de canciones que tienen su arraigo en las diversas regiones nacionales. Lo hace como ejercicio cultural basado en su experiencia de compositor e intérprete complementándolo con una extensa bibliografía de sus lecturas. Acierta en la explicación de cada contenido, con rigurosa técnica, de fácil comprensión para el más lego de los lectores y para el más exigente de sus colegas del pentagrama.
Es un profundo trabajo este de las Músicas Andinas, logrado con técnica rigurosa y riqueza de lenguaje. Evoca las manifestaciones de armonía y de contenido metafórico que alguna vez tuvieron mayor vigencia y que en este siglo sobreviven con dificultad, abriéndose camino por unas trochas difíciles de transitar ante la carencia de apoyo estatal, y la marcada indiferencia de los medios audiovisuales que se resisten a creer en nuestros aires andinos. Resalta en su trabajo el cambio de posición de la Academia que por tanto tiempo se mantuvo a espaldas de los aires andinos tradicionales.
Pondera en el libro la labor de los conservatorios de música que antes solo privilegiaban las llamadas músicas cultas, dejando que se asfixiaran en los cuartos de Sanalejo los aires populares. Destaca algunas universidades colombianas que levantan los retenes para que comiencen a circular libremente, en sana competencia con manifestaciones musicales foráneas, las canciones autóctonas. Posiblemente, como lo sostiene Torres de la Pava, la conmemoración del quinto centenario del descubrimiento de América “propició un ambiente de reivindicación de las entidades locales y étnicas, para que así la música tradicional cobrara algo de vida”, complementando así los esfuerzos de festivales andinos regionales que no pocos quijotes impulsan contra prejuicios y cicaterías de gobiernos.
Como compositor, John Jairo Torres ha sido innovador. Ha logrado desligarse de aquellos símbolos que si iluminaron alguna vez con sus versos musicalizados los caminos de bohemia y arriería, su reiteración cuando es alambicada y llorona, los degrada. No entra con sus análisis y sus composiciones como cantautor de calidad, a denostar de esos símbolos que consagraron muchas gestas colonizadoras, sagrados principalmente para melancólicos arraigados en el interior del país, sino que comprende que ahora hay otros valores y otros estados de alma que ocupan lugares preponderantes en el mensaje y en el mercado musical. Sabe el maestro Torres de la Pava que en los tiempos actuales hay que innovar –sin olvidar pasadas composiciones de calidad–, con seductoras propuestas, para conquistar públicos en una juventud metida hasta los tuétanos en temas que exige la modernidad cultural.
Es un prolijo trabajo que hace el autor. Le imprime a nuestra música andina el valor histórico que se merece en su pasado musical, alertando sobre los retos que tiene para que algún día deje de ser otra “inmensa minoría”.
Para adquirir el libro puede escribir a jtorrespava@gmail.com
Artículo publicado originalmente en el diario El Colombiano, de Medellín.